VI Encuentro Nacional del Proyecto Amigo
80 jóvenes con síndrome de Down ponen en común sus reflexiones sobre su proyecto vital.
El objetivo del Encuentro, que tuvo lugar el último fin de semana de abril en Torremolinos (Málaga), ha sido promover un espacio de intercambio de información y de debate, así como contribuir al empoderamiento de las personas con discapacidad intelectual vinculadas a los proyectos formativos que configuran la "Escuela de Vida" de diferentes asociaciones participantes del programa Proyecto Amigo. A lo largo de sus tres días de duración han tenido lugar diversos talleres, exposiciones y reuniones para poner en común opiniones y conclusiones que promuevan el debate interno sobre las líneas básicas de actuación que han de presidir el funcionamiento del Proyecto Amigo. Una de estas principales líneas gira en torno a las viviendas compartidas, donde estos jóvenes pueden aprender a independizarse y dejar de vivir con sus padres para compartir piso con sus amigos, siempre acompañados de la figura de un mediador. En Málaga hay dos viviendas compartidas con estas características.
Los grupos de trabajo trataron diversos temas sobre autonomía y emporedamiento. |
El papel de los mediadores, siempre voluntario, consiste en «querer conocer de cerca el mundo de la discapacidad, conviviendo con personas a las que se aconseja para que su conciencia reestructure sus pensamientos, pero nunca como cuidadores o tutores», explica la coordinadora del este proyecto, Ester Rodríguez, que también comenzó siendo mediadora en Málaga. Según cuenta, «las personas que han participado como mediadores a lo largo de estos años, han obtenido una cualificación profesional de calidad, al mismo tiempo que han podido transformar su mentalidad y cambiar los numerosos prejuicios que existen en la sociedad en torno a la gente con discapacidad intelectual». Además, asegura que «lo que hace diferente a las viviendas compartidas es que tanto los mediadores como los jóvenes con discapacidad están en el mismo plano de igualdad». A estos mediadores se les forma a conciencia y pasan por un duro proceso de selección.
Una vida independiente
El encuentro ha servido también para analizar y compartir las realizaciones diversas que tiene el Proyecto Amigo en un clima de amistad entre los participantes. Este proyecto forma parte de la Red Nacional de Escuelas de Vida de DOWN ESPAÑA, que representa la voluntad y el deseo de que las personas con discapacidad sean escuchadas con seriedad, reclamando el hecho y el derecho a ser diferentes.
En el VI Encuentro ha estado presente el presidente de DOWN ESPAÑA, José Fabián Cámara, que ha declarado que «estos jóvenes están deseando salir de casa, pero lo que realmente cuesta trabajo es convencer a los padres, porque tienen muchos miedos». «La mayoría no acaba de tener la confianza en que sus hijos puedan llevar una vida de forma independiente. Tienen que andar demostrando día a día que son capaces, porque la mayoría de la sociedad no cree en los potenciales que ellos mismos pueden desarrollar. Debido a esos miedos de la familia, que son lógicos, en Proyecto Amigo se trabaja mucho con ella. Por eso, la única condición que pedimos para que uno de estos jóvenes entre en el proyecto es que tanto él como su familia lo acepten libremente», indica.
De esta forma, la vivienda compartida es un espacio formativo, no un espacio residencial permanente, donde los jóvenes se acostumbran a convivir siendo responsables de sus propias decisiones. Cuando Proyecto Amigo considera que están bien preparados, los jóvenes salen de estos pisos para seguir viviendo de forma independiente o bien volver a casa con sus padres, según la decisión que tome de cada uno.
Por su parte, el presidente de DOWN MÁLAGA, Francisco Muñoz, ha asegurado que «aunque las familias suelen ser reacias a esta independencia, en Málaga hay un grupo de padres y madres que hacen grandes apuestas de futuro por sus hijos». Así, los jóvenes están trabajando en empresas ordinarias y en las viviendas tienen asumidas tareas diarias donde poder actuar con gran responsabilidad.
Conclusiones del Encuentro
A continuación, se exponen algunas de las conclusiones que las personas participantes al VI Encuentro Nacional leyeron en la clausura:
Cristina Rosell, nueva portavoz del Proyecto Amigo
La joven malagueña de 24 años Cristina Rosell representará a los jóvenes con síndrome de Down a nivel nacional para el Proyecto Amigo durante el próximo año. Así lo han querido un centenar de personas pertenecientes a este programa de la Red de Escuelas de Vida de DOWN ESPAÑA, que votaron a su nueva portavoz en el VI Encuentro Nacional de Jóvenes con síndrome de Down.
Hace dos años Cristina ya fue portavoz de las personas con discapacidad intelectual ante las Naciones Unidas. Presentó en la sede de Nueva York, junto a Tonet Ramírez, la Guía de La Convención Internacional de Naciones Unidas sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad vista por sus Protagonistas.
Desde hace cinco años trabaja en el Registro de la Propiedad como administrativa, y puede presumir de tener un contrato indefinido. Tiene su propio sueldo y vive independizada en un piso tutelado en el que reside con otros tres compañeros con síndrome de Down y con una mediadora. Su intención ahora es poder marcharse a un piso compartido el próximo año, donde podrá vivir con sus amigos sin mediadores. Cristina asume este desafío “con muchas ganas”. “Intentaré llevar las peticiones de mis compañeros para mejorar el programa”, asegura con confianza.